Introducción
El hábito de crujirse los dedos u otras articulaciones en el cuerpo es muy común en la población. Algunos estudios reportan que hasta un 45 % de las personas tienden a crujirse los dedos de forma voluntaria y frecuente.
Para muchos, el acto de tronarse las articulaciones no es solo un hábito, sino una necesidad que causa la sensación de placer y relajación de la articulación. Es común escuchar a un paciente decir que necesita hacer un clic para «soltar» la articulación.
Por otra parte, toda la gente ya ha escuchado la madre decir que crujirse los dedos puede causar artritis y dejar la mano deforme.
Durante años tronarse las articulaciones fue un misterio. No sabemos por qué las articulaciones estallaban o si eso podría traer daños a largo plazo. Afortunadamente, este misterio ha sido aclarado recientemente a través de estudios científicos.
En este artículo vamos a explicar por qué las articulaciones crujen y cuáles son las consecuencias clínicas científicamente comprobadas de este hábito.
¿Por qué las articulaciones crujen?
Para entender por qué una articulación cruje, primeramente es necesario describir su anatomía rápidamente.
¿Qué es una articulación?
Llamamos articulación la región donde hay conexión entre dos o más huesos diferentes. Por ejemplo, la rodilla es una articulación que conecta los huesos fémur y tibia (conecta el muslo con la pierna), el codo es una articulación que une el hueso húmero con los huesos cúbito y radio (conecta el brazo con el antebrazo) y el tobillo es una articulación que conecta los huesos tibia, peroné y astrágalo (conecta la pierna con el pie).
Las articulaciones móviles tienen cartílago y una bolsa llena de un líquido viscoso llamado líquido sinovial. Cuando hay movimiento en la articulación, gracias al líquido sinovial y el cartílago, los huesos deslizan entre sí con mínima fricción.
Las articulaciones más fáciles de ser crujidas son las de los dedos, que conectan los huesos entre las falanges y entre las falanges y el hueso metacarpiano, como resaltado en azul en la ilustración anterior.
¿Cómo aparece el crujir de los dedos?
Durante décadas, dos teorías similares acerca del origen de los crujidos ganaron más atención. La más antigua creada en el 1940 sugería que el crujido era causado por la formación de una pequeña burbuja de gas dentro de las articulaciones.
En 1970, esta teoría ha sido ligeramente modificada. Según una segunda explicación, la burbuja de gas sería realmente formada dentro de las articulaciones, pero ella se rompería inmediatamente. El crujido sería el resultado de esta ruptura.
En el año 2015, finalmente se resolvió el misterio. El Profesor Gregory Kawchuk y su equipo de la Universidad de Alberta, en Canadá, han creado un mecanismo en que conseguían crujir los dedos de las manos de un voluntario mientras que las articulaciones eran filmadas por resonancia magnética nuclear.
En todos los dedos crujidos bajo la observación de la resonancia magnética, el sonido del chaqueo surgía exactamente en el momento en que una pequeña burbuja de gas surgía dentro del líquido sinovial, comprobando que la primera teoría, creada en la década de 1940, estaba correcta.
¿Es malo crujirse los dedos?
Según fue comprobado en el estudio del profesor Kawchuk, que se quedó conocido como el estudio «cruje mi dedo», el ruido del crujir de los dedos no ocurre por ningún evento que alcance los componentes sólidos de las articulaciones. No hay un mecanismo que provoque estrés o lesión directamente en la articulación; son solamente burbujas de gas si formando en el interior.
Pero el estudio del profesor Kawchuk no es el único que sugiere que crujir los dedos no es algo perjudicial.
Un estudio publicado en 2011 examinó las radiografías de las manos de 215 personas entre 50 y 89 años y comparó con las articulaciones que a menudo crujían los dedos, con las articulaciones de las personas que no tenían la costumbre de chasquear los dedos.
El estudio concluyó que no hubo diferencias relevantes en las radiografías, y el riesgo de desarrollar artritis o artrosis fue exactamente igual a quien chaqueaba o no los dedos, independientemente del número de años o la frecuencia con que la persona chaqueaba los dedos.
En febrero de 2017 fue publicado un estudio con 35 personas de 19 a 27 años que tenían la costumbre de chasquear los dedos más de 5 veces al día. La fuerza de la mano de estos individuos se comparó con las de un grupo control, formado por personas que no tienen el hábito de chasquear los dedos. El resultado fue exactamente el mismo para los dos grupos, mostrando que chaquear los dedos no causa reducción de fuerza en las manos, especialmente en situaciones donde se necesite agarrar algo o un fuerte estrechar de las manos.
Un caso famoso fue del doctor Donald Unger, que durante 60 años chaqueó diariamente los dedos de la mano izquierda, pero no los de la derecha. El su objetivo era comparar exactamente los resultados en ambas manos para averiguar si el hábito de chasquear los dedos traería daños a largo plazo. Al final de 6 décadas, ningún signo de artritis u otras enfermedades osteoarticulares se formó en ambas manos.
Este «estudio» terminó por proporcionar al Dr. Unger el premio Ig Nobel, que es una parodia del Premio Nobel, concedido a los más extraños estudios de cada año.
Sin embargo, debemos destacar que, en ciertas situaciones, el acto de chasquear los dedos puede causar traumas. Cuando una persona cruje el dedo, la articulación entra en un período de refractividad, donde son necesarios 20 minutos para que ella pueda chaquear los dedos otra vez. Se imagina que este es el tiempo requerido para que los gases presentes en el líquido sinovial vuelvan a diluirse, de forma que se puede formar una nueva burbuja.
Si el individuo seguir forzando la articulación en un intento de chaquear el dedo durante el período refractario, él puede, sí, causar daño a las articulaciones. Otra posible causa de lesión es cuando hay un uso desmedido de fuerza para chaquear el dedo.
La acción de chaquear el dedo debe traer alivio y una sensación de aumento de amplitud de los movimientos de la articulación. Si en el momento de chaquear los dedos sientes un fuerte dolor, o si la articulación quedarse dolorida por un largo tiempo, esto puede ser un signo de una lesión.
¿Es malo crujir las articulaciones?
La gran mayoría de los estudios sobre crujir articulaciones se hizo con los dedos de las manos. Hace sentido pensar que si el chasquido de los dedos no causa daño a las articulaciones de las manos, lo mismo sucedería con quien cruja el cuello, la espalda, los tobillos, codos, etc.
Lamentablemente, esto es solamente una extrapolación de los resultados de las articulaciones de los dedos para otras articulaciones. Podemos decir que, PROBABLEMENTE, crujir las articulaciones no hace mal, pero una respuesta 100 % segura solamente será posible cuando existir ensayos clínicos controlados dirigidos a cada articulación.
Referencias
- Real-time visualization of joint cavitation – Public Library of Science one.
- Knuckle Cracking and Hand Osteoarthritis – The Journal of the American Board of Family Medicine.
- The Consequences of Habitual Knuckle Cracking – The Western journal of medicine.
- A Mathematical Model for the Sounds Produced by Knuckle Cracking – Scientific reports.
- Effect of habitual knuckle cracking on hand function – Annals of the Rheumatic Diseases.
- « My joints are cracking, is it serious doctor ? » A review about sounds produced by joints – Revue médicale suisse.
Autor(es)
Médico licenciado por la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ), con títulos de especialista en Medicina Interna por la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ) y de Nefrología por la Universidad Estadual de Río de Janeiro (UERJ) y por la Sociedad Brasileña de Nefrología (SBN). Actualmente vive en Lisboa, Portugal, tiene títulos reconocidos por la Universidad de Oporto y por el Colegio de Nefrología de Portugal.
Leave a Comment