¿Qué es la menopausia precoz?
Los dos ovarios que existen en la mujer son órganos que pertenecen al mismo tiempo al aparato reproductor y al sistema endocrinológico. En la parte del sistema reproductivo, son responsables de la maduración y liberación de los óvulos para ser fecundados, mientras que en la parte endocrinológica, son responsables de la producción de las hormonas sexuales femeninas. La acción conjunta de ambas funciones es responsable del ciclo menstrual durante los años reproductivos.
Los ovarios envejecen junto con la mujer. Con el paso del tiempo, su funcionamiento comienza a deteriorarse, provocando irregularidades menstruales, deficiencia en la producción de hormonas sexuales, reducción de la frecuencia de la ovulación, disminución de la fertilidad y, finalmente, el cese completo e irreversible de la menstruación, conocido como menopausia, que generalmente ocurre después de los 50 años.
La mayoría de las mujeres entra en la menopausia «natural» entre los 45 y los 55 años. La media es de 51 años. Cuando la menopausia aparece antes de los 40 años, decimos que la mujer ha tenido una menopausia precoz porque sus ovarios han entrado en fallo antes de lo habitual.
A diferencia de los hombres, que producen espermatozoides durante toda su vida, las mujeres nacen con un número limitado de folículos ováricos, que son los precursores de los óvulos.
Por término medio, una mujer comienza su vida con entre 300 y 400 mil folículos ováricos. Aunque sólo se libera un óvulo por ciclo menstrual, el proceso de maduración de este óvulo implica el desarrollo de varios folículos al mismo tiempo. Al final del proceso, solo uno de los folículos madura, dando lugar al óvulo. El resto involuciona y es desechado por el organismo.
Durante los 30 ó 40 años de periodo fértil, la mujer consume todos sus folículos y entra en la menopausia cuando ya no tiene reserva de folículos ováricos. Cuando los ovarios dejan de funcionar, la mujer deja de producir hormonas sexuales, como los estrógenos y la progesterona, y deja de ovular, volviéndose infértil.
Además de lidiar con los síntomas típicos de la menopausia, como los sofocos, la sequedad vaginal y los cambios de humor, muchas mujeres que desarrollan una menopausia precoz sufren también importantes problemas emocionales, especialmente si un embarazo estaba aún en sus planes. Las mujeres sin hijos a las que se les diagnostica una menopausia precoz pueden quedar emocionalmente devastadas.
Causas
La menopausia precoz se produce cuando una mujer nace con una reserva de folículos ováricos menor de la esperada o cuando, a lo largo de su vida, por diversas razones, sus folículos se agotan más rápidamente de lo habitual.
Los estudios demuestran que:
- El 0,1 % de las mujeres entran en la menopausia antes de los 30 años.
- El 0,25 % de las mujeres entran en la menopausia antes de los 35 años.
- El 1,0 % de las mujeres entran en la menopausia antes de los 40 años.
En la mayoría de los casos, los médicos no pueden definir claramente una causa para la insuficiencia ovárica. En algunas mujeres, la menopausia precoz puede explicarse por anomalías genéticas, exposición a toxinas o enfermedades autoinmunes, pero en la mayoría de las pacientes, la insuficiencia ovárica acaba clasificándose como idiopática, lo que significa que no tiene causa conocida.
Aunque la mayoría de las situaciones no se aclaren, es importante una investigación médica, porque en muchos casos es posible identificar un origen.
Entre las causas conocidas de la menopausia precoz podemos mencionar:
Anomalías cromosómicas
Las enfermedades genéticas relacionadas con el cromosoma sexual X, como el síndrome de Turner y el síndrome del cromosoma X frágil, entre otras, pueden provocar una menopausia precoz porque hacen que las pacientes nazcan con ovarios defectuosos, que contienen menos folículos sanos y muchos folículos que sufren atrofia.
Las causas genéticas suelen diagnosticarse pronto y muchas mujeres ni siquiera entran en la pubertad. Sin embargo, es posible que haya casos de mujeres que se desarrollen con normalidad, que comiencen su menstruación en el momento adecuado, pero que acaben entrando en la menopausia de forma prematura.
Fármacos y toxinas
Las causas más comunes de la menopausia precoz provocada por fármacos o toxinas son los tratamientos contra el cáncer a base de quimioterapia o radioterapia. Entre los fármacos de quimioterapia que pueden provocar un fallo ovárico se encuentran: bleomicina, etopósido, doxorrubicina, ciclofosfamida, vincristina y procarbazina.
El contacto con los pesticidas también puede provocar una menopausia precoz.
El tabaquismo también está relacionado con la insuficiencia ovárica, y las mujeres fumadoras tienen un mayor riesgo de sufrir una menopausia precoz. Por término medio, las fumadoras tienen la menopausia 2 años antes que las no fumadoras, pero en algunos casos esta diferencia puede ser incluso mayor.
Nota: el uso de píldoras anticonceptivas no está relacionado con la menopausia temprana.
Enfermedades autoinmunes
Su sistema inmunitario puede producir anticuerpos contra su propio ovario, dañando los folículos ováricos.
Extirpación de ovarios
Las mujeres en edad fértil que se someten a la extirpación quirúrgica de los ovarios, normalmente como parte del tratamiento de tumores malignos del aparato reproductor femenino, obviamente también entran en la menopausia de forma prematura. Si no hay ovarios, no puede haber ovulación ni producción adecuada de hormonas sexuales.
Síntomas
La mayoría de las mujeres que desarrolla la menopausia precoz presenta un desarrollo sexual y reproductivo normal durante la vida, con menarquía (primera menstruación de la vida) en el periodo previsto y ciclos menstruales regulares. No es posible a través de evaluación del patrón menstrual detectar tempranamente cuáles son las mujeres con el mayor riesgo de fallo ovárico prematuro.
Solamente cuando los ovarios comienzan a mostrar signos de fallo es que los primeros síntomas de la menopausia precoz empiezan a surgir. De hecho, los síntomas de la menopausia precoz son similares a los de la menopausia normal; la única diferencia es que comienzan a surgir antes del momento esperado.
Entre los síntomas de la menopausia precoz, podemos citar:
- Irregularidad menstrual.
- Ausencia de menstruación durante más de 3 meses.
- Malestares y sofocos.
- Sudores nocturnos.
- Sequedad vaginal.
- Cambios de humor.
- Disminución del deseo sexual.
- Infertilidad.
En general, solamente un 5 a 10 % de las mujeres que empiezan a entrar en la menopausia precozmente pueden quedarse embarazadas y tener hijos antes del fallo total de los ovarios.
Diagnóstico
Si tienes menos de 40 años de edad y su menstruación es muy irregular, con fallas durante 3 meses o más, consulta a un ginecólogo para una evaluación completa. Puedes estar entrando en la menopausia
En el análisis de laboratorio, las mujeres con menopausia precoz presentan altos niveles de la hormona FSH en la sangre.
FSH es una hormona liberada por la hipófisis, situada en la base del cerebro, que tiene como función estimular los ovarios para que funcionen. Cuando los ovarios entran en fallo, el cerebro responde incrementando la producción de FSH en un intento desesperado de hacer los ovarios volver a funcionar.
Si el paciente muestra signos de cese inminente de la menstruación, asociado a una FSH sanguínea elevada, se puede establecer el diagnóstico de menopausia precoz. El próximo paso será investigar la existencia de una posible causa.
Tratamiento
El diagnóstico de menopausia precoz puede ser devastador para una mujer, especialmente si la misma todavía desea tener hijos. Por ello, no basta el tratamiento para problemas físicos, como prevención de la osteoporosis; es preciso también cuidar de la parte emocional de la paciente.
Una vez que los ovarios dejan de trabajar, los niveles de estrógeno y progesterona de la paciente se desploman. La reposición de estas hormonas es importante, especialmente en la prevención de la osteoporosis. En mujeres jóvenes, la terapia de reposición hormonal tiene más beneficios y menos riesgos en las mujeres mayores.
La reposición de vitamina D es otra manera de actuar en la prevención del desgaste óseo que se produce en la menopausia.
El tratamiento de la infertilidad es un poco más complicado. Como ya se mencionó, solo entre el 5 % y el 10 % de las mujeres con menopausia precoz son capaces de tener hijos. El tratamiento con estrógenos, medicamentos para la fertilidad u otras hormonas no ayuda a mejorar la fertilidad.
Generalmente, la solución es la fecundación in vitro con óvulos donados. Este tipo de tratamiento de infertilidad presenta una alta tasa de éxito, pero tiene la desventaja de necesitar un óvulo donado.
Referencias
- ESHRE Guideline: management of women with premature ovarian insufficiency – Human Reproduction.
- Menopause: diagnosis and management – The National Institute for Health and Care Excellence (NICE).
- ACOG: Committee opinion on primary ovarian insufficiency in adolescents and young women – American College of Obstetricians and Gynecologists.
- Clinical manifestations and diagnosis of spontaneous primary ovarian insufficiency (premature ovarian failure) – UpToDate.
- Management of spontaneous primary ovarian insufficiency (premature ovarian failure) – UpToDate.
- Pathogenesis and causes of spontaneous primary ovarian insufficiency (premature ovarian failure) – UpToDate.
Autor(es)
Médico licenciado por la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ), con títulos de especialista en Medicina Interna por la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ) y de Nefrología por la Universidad Estadual de Río de Janeiro (UERJ) y por la Sociedad Brasileña de Nefrología (SBN). Actualmente vive en Lisboa, Portugal, tiene títulos reconocidos por la Universidad de Oporto y por el Colegio de Nefrología de Portugal.
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