Aftas en la boca: causas, síntomas y tratamiento

¿Qué es una afta?

Las aftas, también llamadas úlceras aftosas, estomatitis aftosa o úlcera de Mikulicz, son pequeñas úlceras que pueden aparecer en casi cualquier parte de la cavidad oral: lengua, labios, encías, garganta, úvula, etc.

Las aftas son úlceras ovaladas, blanquecinas, con bordes rojizos. Pueden ser únicas o múltiples, pequeñas o grandes.

Las úlceras aftosas son muy dolorosas y, a menudo, interrumpen actividades sencillas como hablar, comer y besar. Afortunadamente, las lesiones son benignas y no suelen causar mayores problemas más allá de esta incomodidad.

Sin embargo, hay que tener en cuenta que algunas enfermedades más graves de la cavidad oral pueden manifestarse con lesiones ulceradas muy similares a las aftas, lo que puede causar cierta confusión. Un ejemplo es el cáncer de la cavidad oral, que en las primeras fases puede parecer una afta común. La pista para distinguir ambas lesiones es el tiempo de evolución, que suele ser corto en las aftas simples, pero no mejora en las lesiones malignas.

La mayoría de las aftas duran de media una o dos semanas y suelen curarse sin dejar cicatriz. Las aftas que tardan más en curarse son las que aparecen en lugares donde hay un contacto constante con los dientes o los alimentos, sufriendo traumatismos repetidos a lo largo del día.

Estomatitis aftosa recurrente

Todo el mundo ha tenido al menos una afta a lo largo de su vida y el 20% de la población padece aftas recurrentes. Estos casos se denominan estomatitis aftosa recurrente. Son más comunes en preadolescentes, adolescentes y adultos jóvenes y tienden a disminuir su incidencia con el paso de los años. Después de los 40 años, es habitual tener una afta u otra con el tiempo, pero las úlceras recurrentes son más raras.

Aftosis compleja

Algunas personas tienen úlceras grandes, llamadas aftas major o úlceras de Sutton, que miden más de 1 cm y son profundas. Estas úlceras tardan hasta seis semanas en desaparecer y pueden dejar una cicatriz.

Algunos pacientes con aftosis compleja tienen episodios tan frecuentes que rara vez están sin al menos una úlcera activa. En los pacientes con aftosis compleja, debe excluirse el diagnóstico de la enfermedad de Behcet, sobre todo si el paciente presenta también úlceras genitales.

También existe la afta herpetiforme, formada por múltiples úlceras pequeñas que se unen y se convierten en una gran lesión. Estas aftas pueden ir acompañadas de ganglios linfáticos en el cuello y, a veces, de fiebre baja y malestar general.

Por muy grandes y numerosas que sean, las aftas no suelen provocar mal aliento.

Si no sabes distinguir entre un herpes labial y un herpes febril, lee el siguiente artículo: Diferencias entre afta y herpes labial (con imágenes).

Causas

Las aftas no son contagiosas, pero sus causas no se conocen del todo. La estomatitis aftosa recurrente parece estar causada por desequilibrios del sistema inmunitario.

En la actualidad, la mayoría de los investigadores aceptan esta hipótesis de desregulación inmunitaria que afecta a la mucosa oral, lo que daría lugar a un proceso proinflamatorio exagerado o a una respuesta antiinflamatoria relativamente débil.

Parece existir una predisposición genética al desarrollo de estomatitis aftosa recurrente, ya que es frecuente que los pacientes tengan antecedentes familiares de aftas recurrentes.

Algunos de los desencadenantes conocidos de la aparición de la aftas son:

• Traumas locales, como mordeduras accidentales.
• Estrés psicológico.
• Pocas horas de sueño.
• Algunas pastas dentales que contienen lauril éter sulfato de sódio.
• Reflujo gastroesofágico.
• Comidas, como chocolate, café y bebidas ácidas.
• Tabaco.
• Alteraciones hormonales durante el ciclo menstrual.
• Deficiencia de algunas vitaminas y minerales, como vitamina B12, vitamina C, zinc, hierro y ácido fólico.
• Medicamentos, como antiinflamatorios, rapamicina, metotrexato, aspirina y atenolol.

Algunas personas que tienen la costumbre de acostarse inmediatamente después de la última comida, pueden presentar aftas recurrentes. Este hecho probablemente está relacionado con algún grado de reflujo gastroesofágico, que lleva al aumento de la acidez de la cavidad oral. Las aftas suelen aparecer uno o dos días después, por lo cual, muchas veces, los pacientes no relacionan un hecho con el otro.

Síntomas

Las lesiones de la estomatitis aftosa recurrente tienen un aspecto muy característico: las aftas suelen ser ovaladas o redondeadas, generalmente pequeñas, de 3 a 5 mm de diámetro, con bordes rojizos y un centro blanquecino o amarillento. Las úlceras son poco profundas y limpias (sin pus, bacterias ni otros signos de infección). Pueden ser únicas o múltiples.

Las aftas suelen desarrollarse en las mucosas de la boca y los labios. También pueden estar afectados los pliegues gingivales, la lengua, el paladar blando, la úvula y la faringe anterior. Aunque las úlceras se encuentran predominantemente en las superficies no masticatorias de la mucosa, también pueden verse en el paladar duro (techo de la boca) y en la encía adherida.

La afta suele evolucionar de una pápula dolorosa (elevación pequeña, sólida y limitada en la piel) a una úlcera en un periodo de uno a dos días; después, la úlcera se expande gradualmente hasta su tamaño definitivo en los tres o cuatro días siguientes, se estabiliza y deja de doler antes de empezar a curarse.

En algunos pacientes, las aftas pueden durar sólo cuatro o cinco días, sobre todo si son de pequeño tamaño, pero en la mayoría de las personas tardan de 10 a 14 días en curarse del todo.

Los pacientes que sufren episodios recurrentes de aftas suelen ser capaces de identificar las lesiones en las primeras fases, lo que puede ser útil para iniciar la terapia precozmente.

Aunque algunos individuos pueden referir episodios tan frecuentes de aftas que casi siempre tienen al menos una úlcera activa en la boca, la mayoría de los pacientes suelen tener intervalos de semanas a meses entre los episodios. Una historia de desarrollo aftoso en un lugar de traumatismo reciente en la boca (como una mordedura en el labio) es muy típica de quienes padecen estomatitis aftosa recurrente.

¿Cuándo preocuparse con una afta bucal?

Pese a ser benigna en la inmensa mayoría de los casos, la afta puede ser una manifestación de enfermedades sistémicas o puede ser confundida con lesiones graves, como neoplasia de la cavidad oral.

Una consulta con el dentista o médico estomatólogo debe ser considerada en los siguientes casos:

• La afta es excepcionalmente grande.
• Las aftas son recurrentes con nuevos surgimientos después de la cicatrización de las primeras.
• La afta demora más de tres semanas en cicatrizar.
• Si hay señales de infección en el área del afta.
• Si hay síntomas sistémicos (fiebre, pérdida de peso, pérdida del apetito…) que sugieran la presencia de alguna enfermedad detrás de las aftas.
• Si hay fiebre.
• Si hay úlcera también en los órganos genitales.

¿Qué enfermedades ocurren con aftas o lesiones semejantes?

Normalmente, las úlceras orales causadas por enfermedades sistémicas son múltiples y recurrentes. Suelen tener algunas características diferentes de las aftas comunes y suelen acompañarse de otros síntomas.

• En casos de lupus, las aftas suelen ser indoloras y estar acompañadas de lesiones de piel y dolores en las articulaciones, además de síntomas sistémicos con fiebre baja y cansancio.
• En el caso de la enfermedad de Behcet, también una enfermedad autoinmune, las aftas son múltiples, recurrentes y se hacen acompañar de úlceras también en los órganos genitales. También es común que existan lesiones en los ojos.
• En los casos de enfermedad celíaca y enfermedad de Crohn, las aftas vienen en conjunto con síntomas intestinales, como diarrea y sangre en las heces.
• La neutropenia, que es la disminución del número de neutrófilos (un tipo de glóbulo blanco) en la sangre, también es causante de úlceras orales. Normalmente, es visto en enfermos en quimioterapia, pero puede ocurrir en cualquier enfermedad o medicamento que cause neutropenia.
• Algunos cánceres de la cavidad oral pueden presentarse como ulceraciones, siendo inicialmente confundidos con aftas comunes. Por eso, toda afta que demora en cicatrizar debe ser evaluada por un médico, principalmente si el paciente es fumador.

Varias infecciones pueden causar úlceras orales semejantes a las aftas:

• El virus VIH puede causar úlceras orales en la llamada fase aguda, esto es, algunas semanas después de la contaminación, o en fases avanzadas, cuando ya existen criterios para el SIDA.
• Infección por Coxsackievirus (herpangina), muy común en los niños, puede sobrevenir con dolores de garganta, fiebre, pequeñas úlceras orales y lesiones en las palmas de las manos y plantas de los pies.
• La sífilis, tanto en la fase primaria como la secundaria, puede sobrevenir con úlceras orales. Normalmente son múltiples y, en la fase secundaria, demoran en cicatrizar.
• El herpes labial se presenta como vesículas que pueden transformarse en pequeñas úlceras después de romperse. El aspecto no es muy parecido con la afta, pero puede ser confundido por personas sin conocimientos médicos. Son dos enfermedades diferentes, con etiologías y tratamientos distintos.

Tratamiento

No existe una cura milagrosa. Ninguna sustancia puede curar las aftas de la noche a la mañana.

Los objetivos del tratamiento de las aftas son aliviar el dolor, acelerar la cicatrización de las úlceras y disminuir la frecuencia y gravedad de los ataques. Sin embargo, no existe una terapia uniformemente eficaz para las aftas, y se han utilizado muchos agentes tópicos o sistémicos con éxito variable.

A pesar de ser una lesión extremadamente frecuente, hay pocos estudios de alta calidad que evalúen los tratamientos de las aftas. Casi todos los estudios son de baja calidad y no permiten afirmar con certeza qué terapias son las más eficaces.

A la hora de elegir el mejor tratamiento, es importante distinguir las pomadas que sólo contienen anestésicos, que únicamente sirven como alivio sintomático, de las que contienen corticoides y antiinflamatorios en su fórmula, que pueden acelerar eficazmente la curación.

Control del dolor

Los anestésicos tópicos y las sustancias que favorecen el revestimiento de las úlceras pueden aliviar temporalmente el dolor.

Algunas opciones para controlar el dolor de las aftas son:

• Lidocaína 2% viscosa (gel): la lidocaína puede aplicarse directamente sobre la superficie de las aftas justo antes de las comidas o de cepillarse los dientes.
• Difenhidramina (Benadryl®) solución oral: haz buches de 5 ml y escupe. La solución puede mezclarse con leche de magnesia.
• Pastillas de diciclonina: la diciclonina es un anestésico oral y las pastillas para chupar pueden ser útiles cuando la afta está en un lugar difícil para aplicar el gel.
• Suspensión a base de hidróxido de aluminio, hidróxido de magnesio y simeticona: haz buches de 5 a 10 ml y escupe.

De las opciones enumeradas anteriormente, la lidocaína viscosa es la más eficaz para el alivio temporal del dolor.

Remedios para curar las aftas

Los medicamentos más utilizados para acelerar la curación de las aftas son los corticoides tópicos, como:

• Acetónido de triamcinolona 0,1% o 1 mg/g en orabase (OMCILON- A ®): aplica una pequeña cantidad sobre la afta, sin frotar, hasta que se forme una fina película que cubra toda la lesión. Puede utilizarse de 2 a 3 veces al día.
• Dexametasona (elixir 0,5 mg/5 mL): hacer buches con 5 mL y escupir. Utilízalo de 3 a 4 veces al día. Es importante mantener el medicamento en la boca durante cinco minutos antes de escupirlo. No te aclares después y evita comer o beber durante 30 minutos.
• Gel o pomada de propionato de clobetasol al 0,05%: Aplica una pequeña cantidad en la zona aftosa dos o tres veces al día. No te aclares después y evita comer o beber durante 30 minutos.

Otras opciones:

• Gel o enjuague bucal tópico de ácido hialurónico al 0,2%.
• Suspensión de sucralfato 1 g/10 mL para enjuagar.
• Amlexanox (no disponible en muchos países).

Cuanto antes se inicie el tratamiento, más eficaz suele ser.

La cauterización del afta con nitrato de plata es otra opción capaz de reducir el dolor que causa la lesión.

Los pacientes con estomatitis aftosa recurrente o aftosis compleja que no responden a los tratamientos tópicos mencionados pueden beneficiarse de un tratamiento breve con corticosteroides orales. Normalmente, se utiliza prednisona oral, de 20 a 40 mg al día durante cuatro a siete días.

Remedios caseros para las aftas

El problema con los tratamientos caseros es que la mayoría de ellos nunca han sido estudiados en estudios científicos y, por lo tanto, no hay pruebas científicas de su eficacia o seguridad.

En Internet es muy fácil encontrar innúmeras recetas caseras para tratar las aftas. Hay que tener cuidado con lo que se aplica en la lesión para no aumentar la inflamación y empeorar el cuadro.

Evite el contacto directo de sustancias abrasivas puras, como alcohol o bicarbonato en polvo. Esto puede irritar la lesión y empeorar el cuadro.

Los enjuagues bucales con alcohol también pueden irritar la afta y empeorarla.

La pasta de dientes no es buena para tratar las aftas e incluso puede empeorarlas, ya que muchas marcas contienen lauril éter sulfato de sódio.

Preguntas más comunes

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Referencias

• Recurrent Aphthous Stomatitis: A Review – The Journal of clinical and aesthetic dermatology.
• Recurrent aphthous stomatitis – Clinics in dermatology.
• Recurrent aphthous stomatitis – Journal of oral and maxillofacial pathology.
• How Do I Manage a Patient with Aphthous Ulcers? – Canadian Dental Association.
• Treatment of recurrent aphthous stomatitis. A literature review – Journal of clinical and experimental dentistry.
• Aphthous Stomatitis – Medscape.
• Recurrent aphthous stomatitis – UpToDate.

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