Introducción
Las hormonas producidas por la glándula tiroides son esenciales para el desarrollo del sistema nervioso en los niños y para el control metabólico en los adultos, afectando al funcionamiento de prácticamente todos los órganos de nuestro cuerpo.
Cuando la tiroides está enferma, comienza a funcionar de manera inadecuada, ya sea produciendo demasiadas hormonas, como en el caso del hipertiroidismo, o produciendo muy pocas hormonas, como en el caso del hipotiroidismo.
En este texto te explicaremos los signos y síntomas de un mal funcionamiento de la tiroides, las diferencias entre hipertiroidismo e hipotiroidismo y cuáles son las principales enfermedades que afectan a la glándula.
¿Cómo sé si «tengo tiroides»?
Es muy común escuchar a las personas decir que «tienen tiroides», como si fuera un problema de salud. Todos tenemos una tiroides, es un órgano, como lo son los riñones, el corazón, el páncreas, los pulmones, etc. Decir «tengo tiroides» es lo mismo que decir «tengo cerebro» o «tengo hígado».
Para que esta afirmación tenga algún sentido, debe decir qué problema tiene su glándula, como «tengo hipotiroidismo», «tengo nódulos tiroideos» o «tengo una tiroides perezosa».
¿Qué es la tiroides?
La tiroides es una glándula con forma de mariposa ubicada en la base del cuello, frente a la tráquea y justo debajo de la laringe (también conocida como cartílago tiroides o nuez de Adán). La glándula tiroides produce dos hormonas: triyodotironina y tiroxina, más conocidas como T3 y T4, respectivamente.
Esas hormonas son las responsables por el metabolismo del cuerpo, es decir, el modo en que el organismo almacena y gasta energía.
Cuando la tiroides trabaja mucho y produce hormonas en exceso, ocurre lo que llamamos de hipertiroidismo. Cuando trabaja poco, o cuando ha sido removida quirúrgicamente debido a algún tumor, ocurre lo que llamamos de hipotiroidismo.
Principales enfermedades relacionadas con la tiroides
A efectos didácticos, podemos dividir las enfermedades tiroideas en cuatro grandes grupos:
- Enfermedades que provocan hipertiroidismo.
- Enfermedades que provocan hipotiroidismo.
- Nódulos tiroideos.
- Cáncer de tiroides.
Hablemos brevemente de cada uno de estos grupos.
Enfermedades que causan hipertiroidismo
La principal causa del hipertiroidismo es la Enfermedad de Graves, una enfermedad de origen autoinmune, en la que el sistema inmunitario produce de forma inadecuada anticuerpos contra los receptores presentes en la tiroides, haciendo que la glándula se hiperestimule y produzca más hormonas de las necesarias.
Para más detalles sobre la enfermedad de Graves, lea: Hipertiroidismo y enfermedad de Graves.
Otras posibles causas de hipertiroidismo son:
- Tiroiditis subaguda.
- Adenoma tóxico (tumor benigno productor de hormona tiroidea).
- Bocio multinodular tóxico (múltiples nódulos productores de hormona tiroidea).
- Exceso de yodo (raro, pero puede ocurrir con la administración intravenosa de agentes de contraste yodados para exámenes radiológicos).
- Fármacos: amiodarona, litio, interferón alfa, sunitinib, pazopanib o axitinib.
- Tratamiento del hipotiroidismo con levotiroxina a dosis superiores a las necesarias.
- Struma ovarii (tumor del ovario).
- Mola hidatiforme (tumor trofoblástico gestacional).
- Tumor testicular.
- Adenomas hipofisarios productores de TSH.
- Metástasis de cáncer de tiroides.
Enfermedades que provocan hipotiroidismo
La principal causa del hipotiroidismo es la tiroiditis de Hashimoto, que también es una enfermedad autoinmune. En este caso, sin embargo, los autoanticuerpos se dirigen contra el propio tejido tiroideo, provocando la destrucción progresiva de la glándula y la consiguiente reducción de la producción de hormonas tiroideas.
Para obtener más detalles, lea: Hipotiroidismo: tiroiditis de Hashimoto.
Además del Hashimoto, otras posibles causas de hipotiroidismo son:
- Extirpación quirúrgica de la tiroides.
- Destrucción de la glándula por yodo radiactivo.
- Radioterapia realizada cerca de la región del cuello.
- Deficiencia de yodo (ver bocio más adelante).
- Fármacos: metimazol, propiltiouracilo, etionamida, litio, amiodarona, sunitinib, sorafenib e imatinib.
- Exposición a éteres de difenilo polibromados (PBDE).
- Tiroiditis de Riedel.
Nódulos tiroideos
Los nódulos tiroideos son tumores pequeños, generalmente benignos, de forma ovalada que surgen en el tejido glandular. Menos del 5 % de los nódulos tiroideos son causados por una enfermedad maligna, lo que significa que el 95 % de los nódulos tiroideos no son cánceres.
La gran mayoría de los nódulos tiroideos no causan síntomas. Algunos de ellos, sin embargo, pueden ser productores de hormonas tiroideas, lo que lleva al paciente a desarrollar hipertiroidismo.
También hay casos de nódulos que crecen mucho, lo que puede provocar un aumento de volumen en la región anterior del cuello. El síntoma más común de los nódulos grandes es el dolor o la incomodidad al tragar.
Para conocer más detalles sobre los nódulos tiroideos, lea: Nódulo tiroideo – Síntomas, causas y riesgo de cáncer.
Cáncer de tiroides
El cáncer de tiroides es un tipo raro de cáncer. Es más común en mujeres y personas entre 30 y 60 años.
El cáncer de tiroides generalmente es asintomático y causa síntomas solo cuando el tumor comienza a crecer mucho. Los más comunes son.
- Un nódulo palpable en la tiroides.
- Cambios en su voz, incluyendo ronquera.
- Dolor de cuello o garganta.
- Agrandamiento de los ganglios en el cuello.
- Dificultad para tragar.
Los síntomas de hipo o hipertiroidismo no son comunes en los casos de cáncer de tiroides.
El cáncer de tiroides a menudo es tratable y, en muchos casos, se puede curar por completo.
Síntomas de una tiroides enferma
La mayoría de los pacientes con problemas de tiroides tienen una afección que provoca hipotiroidismo o hipertiroidismo. Por tanto, lo que solemos observar en la práctica clínica son pacientes con signos y síntomas de exceso o deficiencia de hormonas tiroideas.
Síntomas del hipotiroidismo
La falta de hormonas tiroideas ralentiza nuestro metabolismo y puede provocar los siguientes signos y síntomas:
- Agrandamiento de la tiroides, llamado bocio.
- Debilidad, desánimo y cansancio fácil.
- Intolerancia al frío.
- Disminución del sudor.
- Perdida de cabello.
- Aumento de peso leve (el hipotiroidismo no conduce a grandes aumentos de peso).
- Piel seca.
- Uñas débiles.
- Dolor en las articulaciones.
- Reducción del gusto.
- Anemia.
- Síndrome del túnel carpiano.
- Estreñimiento.
- Aumento del colesterol.
- Cambios en la menstruación (más o menos).
- Esterilidad.
- Disfunción eréctil.
- Pérdida de libido.
- Reducción del vello de las cejas.
- Hipertensión arterial.
- Hinchazones (en casos más severos).
- Coma (en casos graves no tratados).
Síntomas del hipertiroidismo
El exceso de hormonas tiroideas puede causar los siguientes signos y síntomas:
- Tiroides agrandada, llamada bocio (puede ocurrir tanto en el hipotiroidismo como en el hipertiroidismo).
- Sudoración excesiva, incluso en lugares fríos
- Intolerancia al calor.
- Debilidad de las uñas.
- Prurito generalizado.
- Piel enrojecida y húmeda.
- Cabello más fino y débil.
- Debilidad muscular.
- Proptosis ocular (ojos saltones).
- Palpitaciones y arritmias cardíacas, especialmente fibrilación auricular.
- Colesterol bajo, especialmente colesterol HDL.
- Hipertensión arterial.
- Aumento de la glucosa en sangre.
- Acropaquia digital (ensanchamiento de las yemas de los dedos).
- Cansancio durante el esfuerzo.
- Cambios menstruales.
- Diarrea.
- Anemia.
- Aumento del volumen diario de orina.
- Perdida de peso.
- Aumento de la sed y del hambre.
- Osteoporosis.
- Irritabilidad y ansiedad.
- Depresión.
- Amnesia.
- Insomnio.
- Dificultad para concentrarse.
- Temblores de manos.
¿Qué es el bocio?
El bocio es el aumento de tamaño de la tiroides, que puede ser notado como un abultamiento en la región anterior al cuello. Puede ocurrir en el caso de hipotiroidismo y en el caso de hipertiroidismo.
El bocio era muy común hasta el inicio del siglo XX debido a la deficiencia de yodo en la alimentación (el yodo es un elemento necesario para la formación de las hormonas tiroideas). A partir de la mitad del siglo pasado, el yodo fue adicionado a la sal de cocina y desde entonces su carencia dejó de ser una causa frecuente de bocio.
Sin embargo, las enfermedades de la tiroides que no están relacionadas con la falta de yodo, como la tiroiditis de Hashimoto y la enfermedad de Graves, también pueden provocar bocio, especialmente si no están bien controladas.
En la mayoría de los casos, el bocio es solo una cuestión estética. Hoy en día, con los tratamientos actuales para las enfermedades de la tiroides, difícilmente la glándula crece lo suficiente como para formar un bocio grande que llegan a obstruir las estructuras del cuello, dando lugar a síntomas, tales como dificultad para respirar, tos, ronquera o dificultad para tragar. Para causar obstrucción de los órganos del cuello, el bocio tiene que ser muy grande.
Referencias
- Clinical manifestations of hypothyroidism – UpToDate.
- Overview of the clinical manifestations of hyperthyroidism in adults – UpToDate.
- Jameson JL, et al., eds. Hypothyroidism. In: Harrison’s Principles of Internal Medicine. 20th ed. New York, N.Y.: The McGraw-Hill Companies; 2018.
- Hypothyroidism – A booklet for patients and their families – American Thyroid Association
Autor(es)
Médico licenciado por la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ), con títulos de especialista en Medicina Interna por la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ) y de Nefrología por la Universidad Estadual de Río de Janeiro (UERJ) y por la Sociedad Brasileña de Nefrología (SBN). Actualmente vive en Lisboa, Portugal, tiene títulos reconocidos por la Universidad de Oporto y por el Colegio de Nefrología de Portugal.
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