Síntomas del infarto agudo de miocardio y angina de pecho

Dr. Pedro Pinheiro
Dr. Pedro Pinheiro

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Síntomas del infarto agudo de miocardio y angina de pecho

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Introducción

El infarto agudo de miocardio, conocido comúnmente como infarto, es un cuadro potencialmente grave que se presenta cuando el flujo de sangre que irriga el corazón a través de las arterias coronarias es insuficiente, llevando a la necrosis de parte del músculo cardíaco.

El principal y más clásico síntoma de infarto es un dolor tipo presión en el lado izquierdo del pecho, con irradiación al brazo.

Sin embargo, el infarto puede ser un acontecimiento traicionero, con síntomas atípicos, como dolor en la boca del estómago, náuseas y vómitos o dolor en el cuello. Además, docenas de otras enfermedades pueden causar dolor en la región del pecho, imitando un ataque al corazón.

Causas de dolor en el pecho

El dolor torácico es el síntoma más temible y el que lleva a los pacientes a buscar atención de urgencia. El miedo a sufrir un infarto es tan grande que incluso los jóvenes sin ningún factor de riesgo de enfermedad coronaria acuden a menudo al hospital por un malestar en el pecho.

El hecho es que hay docenas de enfermedades que pueden causar dolor en el pecho, algunas de ellas simples, como el dolor muscular, y otras graves, como el propio infarto o un aneurisma aórtico.

Pero, ¿cómo se puede saber solamente por los síntomas si un dolor en el pecho es un ataque al corazón o no?

En realidad, no hay una respuesta definitiva a la pregunta anterior. Lo que hacen los médicos es evaluar diversas variables clínicas, como las características del dolor, la edad del paciente, los factores de riesgo, etc., para decidir si el dolor es de alto o bajo riesgo. El diagnóstico en sí solamente puede confirmarse con análisis de sangre y un electrocardiograma.

Como se ha mencionado anteriormente, varias enfermedades que no son de origen cardíaco pueden presentarse como dolor en el pecho. Entre ellas podemos mencionar:

Entre las enfermedades cardíacas que pueden causar dolor en el pecho tenemos:

Si deseas más informaciones sobre dolor en el pecho y sus causas, tenemos un texto específico sobre el tema: Dolor en el pecho: causas y signos de gravedad.

Diferencias entre angina e infarto

Antes de seguir con los síntomas de ataque al corazón, es importante explicar qué es la angina.

La angina de pecho y el infarto de miocardio provocan un dolor torácico de características muy similares, ya que ambos se originan por un flujo sanguíneo inadecuado en las arterias coronarias. La diferencia es que en la angina de pecho el flujo se reduce, pero no lo suficiente como para provocar la necrosis del músculo cardíaco. La angina de pecho es una señal de que el corazón está al límite, trabajando con un flujo de sangre que es solamente suficiente para satisfacer sus demandas básicas.

Imaginemos un paciente que tiene una obstrucción parcial en una o varias arterias coronarias. Cuando este paciente está en reposo no siente nada porque la demanda cardíaca de sangre es baja en este momento.

Sin embargo, cuando este paciente hace un esfuerzo físico, los latidos cardíacos aceleran y hay una necesidad de aumentar el aporte de sangre para el corazón. Como existe una obstrucción al flujo, esta sangre extra no llega en la cantidad necesaria, provocando una isquemia del músculo cardíaco, llamada angina.

Si este paciente descansa, al cabo de unos minutos la frecuencia cardíaca y la demanda de sangre del corazón volverán al basal, con lo que la isquemia y el dolor de la angina desaparecerán.

Por lo tanto, mientras que el infarto es una grave falta de sangre al corazón, que causa la muerte del tejido cardíaco, la angina es una etapa anterior, donde hay una reducción del flujo sanguíneo en las arterias coronarias, pero todavía hay perfusión suficiente para que el músculo cardíaco no sufra necrosis.

Tipos de dolor isquémico del corazón

La isquemia cardíaca puede ser dividida en tres etapas: angina estable, angina inestable e infarto de miocardio. Vamos a resumirlas:

Angina estable es la isquemia cardíaca causada por un esfuerzo físico, estrés o cualquier otra situación que incremente temporalmente la demanda de sangre del músculo del corazón. Hay una o más obstrucciones en las arterias coronarias, pero no son suficientemente grandes para causar dolor en reposo. Cuando el paciente hace un esfuerzo siente dolor, pero es de corta duración y desaparece unos minutos después del reposo.

Angina inestable es la isquemia cardíaca que se produce en reposo o con solamente un mínimo esfuerzo, como bañarse o peinarse el cabello. La obstrucción es grande lo suficiente para que el flujo de sangre sea menor que el necesario en situaciones basales. La angina inestable puede ser considerada un pre-infarto y se clasifica como un síndrome coronario agudo. Solamente con base en los síntomas no es posible distinguir una angina inestable de un infarto.

Infarto agudo de miocardio es una isquemia cardíaca severa que conduce a la necrosis del tejido muscular del corazón.

Infartos fulminantes son aquellos que se producen debido a la necrosis de una extensa área cardíaca, haciendo con que el corazón sea incapaz de continuar su trabajo de bombear la sangre.

¿Cómo es el dolor del infarto?

Normalmente. los síntomas de un ataque al corazón son un dolor en la parte media o izquierda del pecho, como opresión, presión o pesadez, que a menudo se irradia al brazo izquierdo, la mandíbula y/o la espalda. El dolor puede desencadenarse por el esfuerzo físico, estrés emocional o después de una comida excesiva, pero también puede surgir repentinamente en reposo.

El dolor del infarto empeora gradualmente y suele acompañarse de sudoración, falta de aire, palidez, inquietud y, a menudo, náuseas y vómitos. A diferencia de la angina estable, en el infarto el dolor dura varios minutos y no se alivia con el reposo.

Un hecho curioso es que el paciente a menudo informa de su dolor en el pecho como una opresión, cerrando el puño y poniendo la mano contra el pecho para intentar describir este dolor opresivo.

A continuación se ilustran las localizaciones más típicas del dolor por infarto.

Localizaciones más típicas del dolor por infarto.

Cuando el infarto se presenta con los síntomas clásicos que acabamos de describir, el paciente puede sospechar que el dolor es causado por una isquemia del corazón. En estos casos, el paciente suele buscar rápidamente atención médica.

El problema está en los infartos que presentan síntomas atípicos, como es relativamente frecuente en pacientes de edad avanzada, mujeres o diabéticos. A menudo no hay dolor en el pecho y los síntomas se limitan a un cansancio intenso, náuseas y/o una molestia inespecífica en el pecho o el abdomen. Hay muchos casos de pacientes que sufren un infarto y no lo saben. Si la zona necrótica es pequeña y los síntomas son atípicos, el paciente suele descubrir que ya ha sufrido un infarto cuando acude a un electrocardiograma o a un ecocardiograma de rutina.

¿Qué valorar en una queja de dolor en el pecho?

Además de las características del dolor, un otro factor muy importante en la evaluación de un posible infarto es conocer los factores de riesgo del paciente. Cuantos más factores de riesgo para enfermedad coronaria un paciente tiene, más importancia se debe dar a sus quejas, aunque ellas inicialmente no parezcan indicar un cuadro de infarto.

Pacientes diabéticos, obesos, hombres con más de 45 años, hipertensos, personas con colesterol alto, con insuficiencia renal o fumadores presentan mayor riesgo de infarto. En estos individuos, cualquier dolor o malestar en la región del tórax debe levantar sospechas.

Un paciente joven y sin factores de riesgo de cardiopatía coronaria, que llega al hospital quejándose de dolores en el pecho, preocupa menos que un individuo de 55 años, obeso, fumador y diabético que se queja de náuseas y solamente una ligera incomodidad en la región del tórax.

Señales que sugieren otra causa para el dolor en el pecho

Todo dolor en el pecho debe ser considerado como potencialmente grave, sin embargo, algunas características nos hacen pensar en otras causas además del infarto de miocardio. Llamamos dolor atípico todo aquel que no muestra las características clásicas de infarto, cómo dolor opresivo en el centro o el lado izquierdo del pecho, con o sin irradiación al brazo izquierdo.

Los dolores torácicos atípicos generalmente indican otras enfermedades que no el infarto. Vamos a ejemplificar algunos casos de dolor atípico que no sugiere infarto:

1. Un dolor en el pecho que empeora al toque o a la compresión local, a la rotación del tronco o a la movilización de los brazos generalmente sugiere patologías músculo-esqueléticas. El dolor de la angina o de infarto no suele empeorar cuando se aprieta en algún lugar del pecho o cuando movemos el tórax.

2. Dolor en el pecho que no presenta íntima relación con el esfuerzo físico, es decir, que no empeora por correr, subir escaleras o llevar algo de peso, también no suele ser de origen isquémico.

3. Dolor ardiente asociado a ardor de estómago y normalmente presente durante varias semanas y de intensidad ligera/moderada, generalmente indica problemas de origen gastroesofágico.

4. La presencia de fiebre, tos con esputo, respiración sibilante o empeoramiento del dolor cuando se hace una respiración profunda, indican una patología pulmonar.

5. Personas jóvenes sin factores de riesgo, especialmente las mujeres, pueden presentar cuadros de ansiedad que se presentan como dolor en el pecho. Suelen ser personas con problemas personales recientes o crónicos, historia de depresión, llanto fácil, nerviosismo, temblores en las manos y muchas otras quejas, además de dolor en el pecho.

Habitualmente, el paciente que está infartando se queja de dolor en el pecho. Él puede inclusive tener otros síntomas, pero da más importancia al dolor en el pecho. Por otro lado, los pacientes con crisis de ansiedad que piensan estar infartando generalmente se quejan de dolor en el corazón, pero refieren también una gama de otros síntomas inespecíficos, como mareos, visión borrosa, hormigueo en la boca, debilidad en las piernas, dolor en los brazos, dolor de estómago, etc.

Obviamente, nada impide que personas ansiosas puedan infartar. Lo ideal es siempre dejar que el médico decida si el dolor en el pecho es angina/infarto o no. Esto vale, principalmente, para personas que tienen factores de riesgo.


Referencias


Autor(es)

Dr. Pedro Pinheiro

Médico licenciado por la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ), con títulos de especialista en Medicina Interna por la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ) y de Nefrología por la Universidad Estadual de Río de Janeiro (UERJ) y por la Sociedad Brasileña de Nefrología (SBN). Actualmente vive en Lisboa, Portugal, tiene títulos reconocidos por la Universidad de Oporto y por el Colegio de Nefrología de Portugal.

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